MONTAR A LOS 70
REJUVENECER EL CUERPO Y LA MENTE
No es necesario para este programa haber montado antes, alumnos de 60 años aprenden más rápido que menores de 4 años si tienen experiencia. más fácil todavía, es lo mismo en hombres o mujeres. Lo valioso es la mansedumbre de los caballos que hemos entrenado y el apacible y hermoso terreno a los pies del Monasterio Benedictino en Las Condes.
OBJETIVOS
a) Mantener, mejorar o recuperar un buen estado físico y mental, que le permita ser independiente al disminuir la dependencia de otros en actividades diarias, mantener y mejorar capacidades existentes y llegar a esa situación, sin hacer ejercicios violentos.
b) Reunir al adulto mayor en grupos que deportiva y socialmente, puedan hacer ejercicios especiales para lograr un buen equilibrio, destreza en actividades, como paseos a caballo y competencias, juntándose con jinetes voluntarios más jóvenes para levantar los espíritus como para ser ayudados y protegidos en un mundo hermoso que solo el caballo sabe entregar.
c) Levantar el ánimo y las ganas de vivir a los que lo desean, al darles participación en rehabilitación de niños discapacitados.
COMO LOGRARLO
Haciendo de la vejez una etapa activa, aumentando la tonicidad de los músculos, su fuerza, la masa de los huesos y la función del cerebro. Obteniendo ventajas físicas en aspectos tales como: cardiovasculares, pulmonares, musculares, esqueléticas y psicológicas evitando la inactividad y la enfermedad degenerativa que ella produce.
Son cientos los huesos y músculos que se mueven y ejercitan suavemente con el andar del caballo. Esta científicamente comprobado que el andar del caballo entrega al cuerpo casi los mismos movimientos que las piernas del ser humano al andar; esta es la base de la Hipoterapia que rehabilita personas que han perdido su andar o niños que nacen con parálisis en sus piernas. Además el ritmo de la caminata influencia la sincronización central del cerebro con el cuerpo, ayudando en el equilibrio y dando un sentido de libertad de hacer una vida más plena, si hay inicios de Alzheimer, el movimiento del caballo retarda el desarrollo de la enfermedad.
Hay una clara actitud en el montar a caballo con seguridad, hay un rejuvenecimiento que uno empieza a reconocer, que es la capacidad y destreza de ir aprendiendo cosas nuevas, la relación caballo - jinete abre un campo de enormes proporciones que alegran el espíritu al incorporar al cuerpo la agilidad, mejor equilibrio y una mejor postura. Aprendiendo también manejo, sentir del caballo y aptitudes personales que uno ni ha soñado más una serie de satisfacciones de iniciar una nueva actividad y desafío acompañado por amigas y amigos.